La velocidad e información proporcionada por la analítica son mucho más poderosas cuando se integran con ideas innovadoras y creativas.
En el transcurso de los últimos años vemos un aumento constante y pronunciado en la modernización del marketing para impulsar el crecimiento de la empresa. Siempre ha dependido de las nuevas tecnologías, más aún en los últimos dos años debido a la pandemia. El objetivo principal de la mayoría de las nuevas herramientas y la razón del reinado de Big Data es generar conocimientos que se traduzcan en valor económico.
Una de las herramientas más modernas aplicadas en marketing es el uso de análisis predictivo basados en el aprendizaje automático: se trata de procesar los datos en tendencias y conocimientos que permiten a los especialistas en marketing tomar mejores decisiones con respecto a la participación del cliente. Los datos disponibles se destilan para una mejor focalización, segmentación y personalización dirigida a clientes potenciales. La automatización del marketing es una gran mejora que permite a las empresas ahorrar tiempo y costos valiosos para optimizar las tareas manuales y desviar la energía de los empleados hacia un trabajo más estratégico. Todo ese trabajo enfocado impulsado por el análisis de datos a menudo se denomina «marketing de precisión» y permite a las empresas ofrecer productos y servicios adecuados.
Al observar la revolución digital en la que todos vivimos, uno podría pensar que las máquinas, los números, los datos y la analítica son instrumentos de marketing dominantes y no dejan espacio para la imaginación y, sobre todo, la creatividad. De hecho, la creatividad y la analítica no son enemigas – cuando están bien integradas, forman un equipo ideal que ninguna empresa debería ignorar. Un enfoque holístico que incluya conocimientos de diferentes campos es una receta para lograr el mismo objetivo – aumentar los ingresos y atraer mejor a los clientes.
Un estudio de McKinsey de hecho agrega un tercer elemento a la ecuación, llamado «triple juego de crecimiento», que incluye creatividad, análisis y propósito. Según el estudio, el uso de los tres componentes puede impulsar en promedio las tasas de crecimiento 2,3 veces en comparación con las empresas que no utilizan ninguno de los tres. El comportamiento del comprador en constante cambio significa que la fusión de la creatividad y el análisis de datos es necesaria para ofrecer al cliente unas experiencias profundamente personalizadas. Al mismo tiempo, el propósito permite a los especialistas en marketing elegir correctamente las estadísticas que mejor se alinean con los valores y objetivos de la empresa.
Según McKinsey, las empresas que aplican la creatividad y los datos en conjunto tienen tasas de crecimiento dos veces más altas que las empresas que no lo hacen. Los así llamados “integradores” son conscientes de que incorporar conocimientos de ambos ámbitos es lo más beneficioso para su trabajo, y al mismo tiempo para su empresa – logrando un crecimiento del 10% al año.
Otra encuesta interesante, realizada por la agencia de marketing Walker Sands, muestra que los especialistas en marketing están seguros de que una combinación de creatividad y tecnología es la mejor manera de lograr un crecimiento en el futuro. El 56% de ellos dicen que en el futuro su estrategia de marketing se basará en ambos valores.
La mejor conclusión es esta – aprovecha al máximo tus datos, pero también encuentra la combinación de datos y creatividad que permita a tu empresa brindar a los clientes la experiencia más atractiva posible.
¿Y tú, ya eres un integrador?